La moneda

Emiliano Arizmendi



A Sara Ahmed


Tengo miedo de irme a dormir,

de perder mi tiempo en la inactividad del sueño.

Tengo miedo de cerrar los ojos

y que los gramos de vida se quemen

en el fuego de mis neuronas durmientes,

con las flamas de tu memoria

tal como tabaco al tocar tus labios

en un sueño simbólico.


¡Tener y no querer!

Tener sueño y no querer dormir,

quererte y no poder tenerte

que juegito tan macabro.


En un mundo sin una axis vertical

y solo con noción de movimiento,

de transcurrencia temporal

tal vez ahí podría tenerte

y tu quererme.

Ahi podria sentir tu piel morena

labrada de piedra volcánica

tal guerrero jaguar listo para la batalla.


En ese lugar sin sentido de derechez,

tal podría decirte cuan mucho tu presencia

me hace temblar

como ciudad construida en un lago

de ilusiones y esperanzas,

de lagunas mentales donde no se si

tu nombre o tu cara

son las mias.

Sonríes y tomo tu cachete,

el negro de tu camisa se pierde en tus ojos

como mis neuronas se gastan en tus recuerdos

y mi sangre una vez más circula

al ritmo de tus manos,

tu sonrisa de centenarios.

Tengo sueño y dormir no quiero,

cerrar los ojos me da pavor

pero si eso significa entrar

en un mundo sin línea vertical,

entonces dormir quiero por siempre

para así tenerte poder,

y que tu me percibas

no como objeto, sino como sujeto

uno igual a tu misma dirección.


Que juego tan macabro,

quererte y no tenerte.

Cierro mis ojos y tu manos

me despiertan.